Mostrando entradas con la etiqueta trabajo. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta trabajo. Mostrar todas las entradas

viernes, septiembre 28, 2012

Pongamos que hablo de Madrid


Desde hacía ya un tiempo yo ya lo sabía. Granada es preciosa, bella, romántica, y cálida; pero se me estaba acabando. Un amigo me dijo una vez que supo que tenía que irse ya no sólo por las circunstancias sino que tenía tantos recuerdos asociados a tantos sitios que sentía que tenía que crear nuevos, en un sitio nuevo.
Me quería ir, pero no tenía el valor... o la irresponsabilidad, poco a poco me despedía de Granada.
Y llegué a Madrid, inocente y confiada, con más ilusión y proyectos de futuro de los que tengo ahora (Quizás por que soy más realista). El principio no fue fácil, tuve que luchar por un sueldo, buscar un piso en condiciones (lo cual costó MUCHO más de lo esperado), conocer la ciudad. El primer mes fue horrible, lo admito. Pensaba en que había deseado esto durante mucho tiempo, y no podía echarme a atrás, no cabía la posibilidad de volver. Yo no me lo habría permitido.
Me hice un hueco en el trabajo, y poco a poco logré más responsabilidades. Y de una simple auto-candidatura tras ver un anuncio encontré un segundo trabajo. Fui afortunada, más de lo que me atrevo a pensar. Yo suelo decir que tuve suerte, JC sin embargo dice que luché mucho, que él me vio.
Un año después de llegar, escribo esta entrada desde el sofá de mi apartamento en el Noroeste de Madrid. Decorado casi por entero con muebles de Ikea (más adquisiciones), un poco más recargado podría ser parte de una tienda. Me costó mi trabajo vivir tranquila y por fin lo agradezco. Por fin tantos disgustos se ven recompensados por la tranquilidad de vivir con quién más quieres estar, y como tú quieres vivir.
Un año después me conozco muy bien el plano del metro y de algunas líneas de cercanías. He recorrido muchos tramos en ellas ¡hasta llegar a Humanes!
Un año después me reincorporo al trabajo, con un poco más de experiencia y más mala leche, después de la experiencia este verano con las clases de recuperación con alumnos problemáticos.
Un año después sigo descubriendo sitios en Madrid, más de los que me gusta admitir. Y aún me queda mucha gente por conocer, quizás porque aquí no es tan fácil.
Me gusta el sur, pero no quiero volver, aún no hay razones por las que regresar...


miércoles, junio 08, 2011

Decisiones

Camino bajo un lluvioso mediodía por el Realejo de camino a casa, pensaba ir a comprar, pero la lluvia aprieta y no es buena idea. Así que me dirijo a mi piso mientras pienso en esta entrada. En mi mp3 suena "All things must pass".
Decisiones. Pienso en mis decisiones. He decidido dejar de amargarme por las cosas que no puedo controlar, pero es complicado. Sigo pensando.
Sino hubiera elegido ese tutor, sino hubiera hecho el máster...pero como sabía yo que ese tutor no me iba a apoyar, como podía saber que el máster no sería mi lanzadera al doctorado. No podía ni imaginarlo y decidí luchar como pude.
Si me hubiera ido de Granada al terminar la carrera quizás estaría en Linares trabajando en alguna academia. Si no hubiera hecho lo posible por encontrar trabajo no hubiera hecho mis prácticas en el CLM, factor determinante en el proceso de selección de mi actual trabajo. Sino hubiera ido a la entrevista de trabajo para A.University, ya que acababa de hacer tres entrevistas de trabajo en Madrid y el teléfono sonó cuando estaba en la biblioteca. Quizás ahora estaría en Madrid.

Quizás.

Si hubiera terminado la tesina antes quizás ya estaría siguiendo los pasos necesarios para cambiar esta situación.
Quizás si hubiera recogido más información para mi curso de Universem estaría trabajando en algo muy diferente. Quizás si hubiera aceptado aquel curso de prácticas ahora estaría en Viena.
Si me hubieran aceptado en el lectorado ahora estaría en Canadá.

Da vértigo pensar todo esto, ¿verdad?

¿Fueron decisiones equivocadas? Ultimamente no puedo evitar pensar en todos los pasos equivocados, en todas las coas que podrían ser distintas. Me cuestiono a mi misma, lo que pienso, lo que siento, dudo, me siento mal, no me concentro. Escribo esta entrada en trozos de papel y los pego en mi mesa. Quizás tienen razón los que dicen de mi que no estoy equilibrada.



Quizás también estoy un poco loca.

Me voy. Me doy de plazo hasta final de año, para dejar esta ciudad, para terminar lo empezado, para seguir mis sentimientos, y mis sueños. Si es una decisión equivocada, aún no puedo saberlo; sólo el tiempo lo dirá.