El paraíso de todo amante de la música: una conocida tienda de música en Madrid. Ojeando los vinilos encontró uno de sus discos favoritos. Se volvió para buscarlo con la mirada. Estaba unos metros más allá. Llegó con el disco en la mano, sonriente. Él se giró. Sostenía el mismo álbum. Ambos soltaron una risa nerviosa.
- Me das miedo - dijo.
2 comentarios:
Que sepas, que ahora te seguiré más en tú blog, porque los estoy centralizando todos en mi google reader.
Por cierto muy buena... la micro, micro historia. :D.
Woooh si eso ocurrio de verdad es un pasote.
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