La mejor historia del mundo
Hace un tiempo, durante una clase muy aburrida de Literatura Inglesa II (si no recuerdo mal) el profesor, irlandés hasta la médula, rosáceo y muy serio, decidió contarnos una historia que le había pasado a un amigo suyo escritor.
El amigo en cuestión había escrito muchos relatos cortos y novelas que habían pasado desapercibidas por el gran público, aún así seguía escribiendo en busca de la idea genial que lo lanzara a la fama.
Una noche, en el momento antes de reunirse con Morfeo y caer en un profundo sueño tuvo una idea magnífica, era la idea que le daría el Nobel de literatura, era... se fue. Se quedó dormido y a la mañana siguiente no logró recordar nada. La noche siguiente intentó relajarse, en busca de aquella historia que había rozado su mente la noche anterior, pero de nuevo volvió a quedarse dormido. Angustiado por no recordarla decidió dejar una libreta y un boli en la mesita de noche, lo más cerca posible de la cama, para que en el momento que aquella historia rozara lo más leve su parte consciente pudiera ponerla por escrito, y recordarla a la mañana siguiente. Y así ocurrió, en los momento previos a quedarse dormido aquella idea volvió a su mente. Cogió la libreta a oscuras, escribió lo que su cansancio (y la oscuridad) le permitió, y con la sensación del deber cumplido se quedó dormido.
A la mañana siguiente se despertó ilusionado, deseando recordar aquella maravillosa historia que por fin ahora podría plasmar. En la libreta sólo había escrita una línea:
"Boy meets girl"
2 comentarios:
De hecho "boy meets girl" es muy socorrido en nuestras mentes, y en el fondo es la historia de todos, la historia del comienzo de una vida... Lo mejor es lo que hacía Coleridge: opiáceos y a escribir! xD
:¬)
Un ánimo mucho mejor que algunas de tus últimas entradas… ;¬) Besos.
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